Añade la mantequilla a un tazón y revuelve hasta obtener una textura uniforme. Agrega al tazón el limón rallado, el ajo, la sal y la pimienta. Revuelve hasta que quede bien mezclado. Coloca la mezcla anterior en papel aluminio, séllalo bien y déjalo refrigerar por 30 minutos. Marina el salmón con aceite, sal y pimienta. Enciende la parrilla y colócalo a cocinar alrededor de 9 minutos. Cuando esté listo el salmón añade una cucharada de la mezcla de mantequilla de limón y deja que se derrita alrededor de 30 segundos. Sirve y decora con una cucharadita de mantequilla de limón sobre el salmón y limones en rodajas.